La transformación del sector bancario hacia los servicios digitales (banca online, aplicaciones móviles, tarjetas, etc.) genera, por un lado, mayor versatilidad y accesibilidad a los usuarios de servicios bancarios. Una de las ventajas de la digitalización de las transacciones y pagos monetarios se ha puesto de manifiesto durante la pandemia de Covid-19: los comercios han optado por esta modalidad de pago para evitar los contagios que facilita el manejo de dinero en metálico. Además, las entidades bancarias han estimulado la realización de operaciones a través de apps y plataformas de banca online con el objetivo de minimizar las visitas a sucursales y cajeros.
No obstante, la brecha digital, que afecta a colectivos particularmente vulnerables (mayores, personas de baja renta, personas con discapacidad, migrantes,…) se suma en este caso a las circunstancias de exclusión financiera – total o parcial – que sufren estos colectivos: Según la encuesta base del Boletín de Vulnerabilidad Social nº 11 de Cruz Roja (2015), sólo un 39% de la población atendida por esta entidad – población vulnerable – disponía de tarjeta bancaria, y apenas un 5,3% de servicios de banca online. La falta de utilización de las herramientas bancarias digitales, y la mayor utilización del efectivo, se convierte así en un factor de riesgo doble: (1) sanitario, por una mayor exposición al virus; y (2) económico, por los mayores costes que puede generar a un hogar: en el Reino Unido se estimaba en 2018 que la prima de pobreza (poverty premium) directamente asociada a la falta de acceso a una cuenta corriente con medios de pago es de 307 £ por año, costes asociados mayoritariamente al uso de los cajeros y gestiones en sucursal (Financial Conduct Authority, 2018. ). Actualmente, la falta de tarjeta o pago a través de móvil aumenta la brecha social dificultando, e incluso impidiendo, las compras presenciales y online.
Este proyecto propone la elaboración de recursos de educación financiera para personas en riesgo de exclusión social no usuarias de servicios bancarios, y particularmente enfocada en los soportes digitales. Se plantean como complemento de la formación en competencias digitales que están desarrollando diferentes entidades sociales con las que EsF ya trabaja en red (Fundación Secretariado Gitano, Fundación Tomillo, Cáritas, Cruz Roja, Codespa y EAPN Castilla la Mancha, además de los espacios de igualdad del Ayuntamiento de Madrid). Estos recursos se aplicarán a formación fundamentalmente online.
El proyecto tiene como objetivos facilitar el acceso y uso de los servicios bancarios a las personas vulnerables, visibilizar las cuentas de pago básicas como recurso para la bancarización, consolidar sus conocimientos financieros, en concreto sobre los servicios digitales, y sensibilizar de forma crítica sobre la importancia de la gestión del dinero como aspecto de cambio social, empoderamiento y gestión de riesgos. Como objetivo último, se pretende disminuir la dependencia de las personas vulnerables del uso de efectivo, y minimizar su potencial impacto negativo sobre la salud y la economía familiar.
Los recursos de sensibilización y formación, visuales y basados en parte en gamificación (vídeos, simulador, infografías) abordarán las siguientes temáticas:
– Conceptos básicos financieros
– TICs (tecnologías de la información y comunicación)
– Elaboración presupuestaria
– Derechos del consumidor
Alcance: Estos recursos se pondrán a disposición de entidades asistenciales del territorio español que ya están trabajando en formación digital y provisión de tecnología a personas vulnerables. Su diseño estará acompañado por dos tutorías online de una hora de duración en grupos de 6-8 personas. Se realizarán 20 (10+10) tutorías iniciales, que formarán a entre 60 y 80 personas beneficiarias, y a personal técnico de las entidades asistenciales, lo que creará una red de formadores para la continuidad del proyecto.
Fundación Economistas sin Fronteras
Economistas sin Fronteras es una Organización no Gubernamental de Desarrollo, fundada en 1997 por un grupo de profesores y catedráticos universitarios, activamente comprometidos y preocupados por la desigualdad y la pobreza.
Nuestro objetivo principal es contribuir a generar cambios en las estructuras económicas y sociales que permitan que sean justas y solidarias.
Nuestros fines son la realización de proyectos para contribuir al desarrollo de zonas y colectivos de población vulnerables desde un enfoque de Economía Social y Solidaria; el fomento de una nueva cultura económica a través de la promoción de la Responsabilidad Social Corporativa y las Inversiones Socialmente Responsables y la realización de acciones de sensibilización y educación para el desarrollo de la sociedad civil. Para ello realizamos estudios de investigación; formamos y asesoramos a organizaciones sociales, empresas y personas emprendedoras; colaboramos con centros educativos; y sensibilizamos y asesoramos a la ciudadanía, al tercer sector y al sector financiero.